Si fuera poesía, leería tus versos
con la fuerza de un amante sin control.
Me acercaría peligrosamente a tus rimas
y las cantaría con la pasión de un ruiseñor.
Si fueras poesía,
tu belleza se convertiría en el absurdo común
de la humanidad y la condenarías a la extinción.
Si fueras poesía...
Pero eres mujer....
Y eso, eso sólo me hace desearte
hasta la saciedad de tu sensualidad.
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